“El tramo Rosario-Buenos Aires, una de las principales vías del país, sigue fuera de servicio días después del temporal, generando serios inconvenientes y ruta exponiendo a quienes transitan por allí a un peligro constante e inaceptable”, remarcaron desde la entidad. La única opción disponible actualmente, la Ruta Provincial Nº 41, ya era considerada riesgosa en condiciones normales, y ahora, colapsada por el desvío del tránsito, presenta serios problemas de mantenimiento, falta de señalización y ausencia de controles que garanticen la seguridad. Según detallan, en la zona del corte apenas hay personal trabajando, y quienes están allí “pasan el tiempo mirando sus celulares”, con escasa maquinaria operativa y señalización deficiente.

Además, criticaron que no se ha comunicado ningún plazo concreto para la finalización de las reparaciones, ni se observa una exigencia clara a las empresas concesionarias o a los gobiernos provincial y nacional para que den respuestas urgentes.

“La situación es crítica y quienes deben circular por la zona están arriesgando sus vidas diariamente. La falta de acción, el desinterés y la inacción estatal constituyen una muestra palpable del ‘terrorismo vial’ y de una decadencia estructural que ya no se puede esconder”, afirmaron.

El comunicado concluye con una dura reflexión: “Mientras en otros países se ejecutan operativos eficaces ante emergencias, en la Argentina actual eso parece un sueño lejano, una ficción. No podemos seguir aceptando lo inaceptable. El tiempo se terminó”.