Tras ese bimestre donde los ingresos no reaccionaron a la velocidad de los precios, de acuerdo al informe del CIFRA, la recesión funcionó como un freno para las subas de precios. "En ese marco, algunas negociaciones paritarias pudieron recuperar parte de lo que habían perdido, lo que se muestra en el promedio como un mínimo repunte relativo", explicó.
La pérdida de poder adquisitivo se sintió más fuerte en el sector público, donde se verificó una caída de 21,3% contra un sector privado que tuvo una caída del orden del 11,2%, dando como promedio del semestre el 14,9%. En la misma línea, el salario mínimo, vital y móvil sufrió una caída incluso mayor, alcanzando un alarmante 28,8% entre noviembre de 2023 y mayo del año en curso.